DA TIEMPO AL AMOR "Novedad"
TAMBIÉN DISPONIBLE EN AMAZÓN
lunes, 2 de junio de 2014
Dentro de mi fervor por encontrar nuevas historias que ofreceros, hoy me vais a premitir que os lleve al maravilloso mundo de la industria cárnica, sí, tal como lo leéis, y será de la mano de mi carnicera de confianza Mª Teresa Lledó.
Como bien dice el refrán: "nunca te acostarás sin saber una cosa más", y eso es exactamente lo que me ha sucedido esta mañana al visitar el puesto de carnes que tiene mi amiga en el mercado de Los Ángeles de Alicante. Estaba realizando la compra de la semana cuando hablando de todo un poco, de repente ambas nos hemos visto enzarzadas en una besuguina conversación relacionada con la calidad de las carnes, y cuándo es el mejor momento para su cocción.
-Si te llevas este conejo, María, mejor no lo hagas hoy, si quieres lo maceras con ajo, perejil, sal, pimienta y vino blanco, y lo dejas dos días en el recipiente dentro del frigorífico, cuando lo saques, lo metes tal cual al horno y verás que bueno está -me aconsejaba Teresa.
-Pero, ¿por qué no puedo hacerlo hoy? -le he consultado con cara de extrañeza.
-Por que las carnes que están recién matadas suelen pecar de duras, es mejor dejarlas un día o dos para que se mueran los nervios y músculos de la pieza, así resultan mucho más tiernas.
¡Vaya!, que sorpresa -me he dicho-, entonces, todas las carnes que me he comido hasta ahora, que me las han vendido en otros establecimientos con la frase marketiniana de: "llévesela sin recelo, ya verá como se deshace en su boca", y luego, resulta que cuando la metes en la sartén parece una suela de zapato de lo dura que está, qué es, ¿por que los nervios todavía están vivos, o porque el dependiente de la carnicería se ha pasado de listo y me ha vendido un seiscientos con carrocería de mercedes?...
Moraleja:
Si carne has de comprar,
hazlo dónde te puedas fiar.
Estoy segura que la historia que os voy a contar hoy, a más de uno le pueda resultar familiar, incluso lo esté viviendo en estos instantes.
Dicen que las cosas siempre suceden por algún motivo, en mi caso fue así. Hace años que como todos sabéis, me apasiona escribir, y lo estaría haciendo constantemente, tal como os he comentado cientos de veces en alguna de mis intervenciones en los medios de comunicación, o en los actos que acompañan a las presentaciones de mis novelas, pero también hay un motivo de peso y oculto que me hace trasnochar, y ese motivo es mi padre.
Desde hace años mi padre padece una disfunción en el sueño, pues bien, no fui consciente de ello hasta que un día, que yo me encontraba escribiendo inmersa en la trama de una de mis novelas, serían sobre las 3 de la madrugada, cuando le escuché levantarse, salir al pasillo de mi casa, y dirigirse hacia mí despacho. Lo primero que me extrañó fue que llevaba fuertemente aferrada entre sus brazos una manta, así que esperé que me hablara y ahí fue cuando me quedé estupefacta. Mi padre, muy amablemente y como si estuviese hablando con una desconocida, me pidió si podía ayudarle e indicarle dónde quedaba su casa.
¿Cuántos recovecos tiene la mente del ser humano?
Imaginad mi sorpresa al ver que mi propio padre me hablaba de Vd. y me pedía ayuda. Inmediatamente algo me puso en alerta y dentro de mi cerebro reconocí al instante lo que allí estaba sucediendo y que se salía de todo entendimiento. Mi padre no me reconocía, es más, pensaba que estaba en un parque, por ello lo de la manta. Más tarde, cuando ya conseguí que recobrara la memoria me explicó, que la llevaba por si tenía que tumbarse en algún banco a dormir esa noche en el caso de que la señora de la luz -que era yo-, no pudiera ayudarle. Desde entonces espero a acostarme hasta que él se despierta de ese sueño en el que se queda enganchado, y le hace deambular despierto por una casa que ninguna noche reconoce, y hablar con una mujer que nunca sabe que es su hija.
¿Cuántos laberintos tiene todavía sin explorar?
Por si alguien se lo está preguntado, mi padre, tras ese episodio de absentismo total, me suele acompañar por todas las estancias de la casa para volverlas a reconocer, y cuando ambos consideramos que ¡ya está de vuelta!, entonces se acuesta de nuevo. Al día siguiente, ¡sorprendente!, es como si nada hubiese pasado, por ello espero que llegue la noche con temor y es, porque al llegar la madrugada, la historia se repite y no sé si algún día no conseguiré sacarlo de ese sueño. Quizás no debí contaros esta parte tan íntima de mi vida, pero es la 1:00 de la madrugada, todavía me faltan dos horas para encontrarme con mi padre, y una vez más negociaré con el Dios Morfeo que lo suelte de sus garras y le permita volver a la realidad.
domingo, 1 de junio de 2014
Con un pronóstico de lluvia de un 70%, todos sabíamos lo que podría suponer aquello, pero lo que nadie imaginó fue lo que en verdad sucedió en la presentación de A LA SOMBRA DE TU PIEL en Casa del Libro de Alicante.
Como en cualquier acto de esta índole, los preparativos previos son fundamentales, así como el micrófono, las sillas en la zona destinada al público asistente y, en mi caso, también el material necesario para la proyección del book tráiler de la novela.
Seguro que os estaréis preguntando el por qué le doy tanta importancia a estos efímeros detalles, pues muy sencillo, por que nos costó Dios y ayudas encontrar una pantalla en condiciones, casi más que buscar una aguja en un pajar, si no, preguntárselo a Roberto Martínez, socio y director de Solvem Consultores, que estuvo durante semanas intentando localizar una para la ocasión, aprovechando su circuito de charlas y conferencias por distintas empresas; sin embargo, y a pesar de sus contactos, no hubo forma humana de encontrarla hasta que, a la desesperada, no tuve más remedio que hacer un llamamiento entre mis amigos de Facebook.
Casi a la par que colgaba este comentario, recibía una llamada de teléfono, podría decirse que desde los mismísimos cielos, mi anuncio había sido leído por mi buen amigo Jorge Crespo Carralón, gerente de Ireco, quien muy amablemente me dijo que no me inquietara más, que ponía su pantalla a mi disposición; para que luego digan que las redes sociales solo sirven para recordarte que has de felicitar a un desconocido.
Y se acercaba ya la hora de iniciar la presentación y con Jesús Coronado sentado junto a mí, la cosa prometía, él era el encargado de leer un fragmento de mi novela y yo sabía de ante mano que lo haría genial, por eso le encomendé dicha tarea. Cuando se acercó a mi oído para hablarme, pensé que era para decirme que me tranquilizara y desearme suerte, sin embargo fue para formularme una pregunta que me inquietó:
María, pero... ¿dónde está Pepe?
Pepe Llorca, mi amigo, el de la tele -como muchos lo conocen-, presentador del programa "Oxigénate" en INFORMACIÓN TV, que se suponía que tenía que estar sentado a mi derecha y presentar el acto con Jesús y conmigo, ni corto ni perezoso se había levantado de su asiento y se paseaba por el recinto de la Casa del Libro con micrófono en mano, incitando más que invitando, a que el resto de asistentes se sentara con nosotros y participaran del evento.
"Pero ¡Pepe!, que aquí no se hace eso...jajaja" -le dije, indicándole que volviera junto a nosotros para poder comenzar y dejara al resto de personas tranquilas que leyeran o compraran lo que desearan. A la vista de lo sucedido, el público que estaba sentado, y los que permanecían de pie a nuestro alrededor a la espera de escucharnos, se dieron cuenta de la ocurrencia de este show-man innato, y no pudieron evitar reírse a carcajadas, y es que quien lo conoce, sabe que Pepe es todo un crack.
Una vez que lo tuvimos bajo control -o eso supusimos-, le dejamos hablar a su libre albedrío y la cosa, en lugar de mejorar, empeoró. Nos arrancó sonrisas y carcajadas a todos y fue un verdadero placer escucharle hasta tal punto, que casi se me olvida hablar a mí...jajaja.
Tras la proyección del booktráiler, un trabajo genial de mi buena amiga Marta Soria Guerrero, en la super pantalla de Jorge, tocó mi turno de palabra. Como el ambienta ya estaba un tanto revolucionado, la cosa siguió en la misma tónica, distendida y amena, solo guardamos la formalidad cuando escuchamos la voz modulada de Jesús Coronado leyendo "El pasado llama a la puerta", uno de los emocionantes capítulos de mi novela.
Y tras las risas, la lectura y mi monólogo sentido e improvisado, llegó el instante mágico de las dedicatorias.
Tuve la grata sorpresas de encontrar entre el público a una antigua amiga de la escuela primaria del Colegio San José-Hijas de la Caridad de Alicante, como Carmen Bonal, que el día anterior se había enterado de que su compi del cole, se había convertido en una escritora.
También conté con la asistencia de la incondicional Alejandra Francés, que no se pierde ni una y la pareja formada por Federico Molinero y Ana Campayo, constructores de hogueras. Santiago Aguado, el impresor y editor de este libro fue una sorpresa inesperada al igual que otros amigos que desde ese día, pienso que seguiremos en contacto.
En resumidas cuentas, está claro que en la próxima presentación invitaré solo a Jesús Coronado y me olvidaré de Pepe Llorca, ya que éste me resta protagonismo...jajaja
Desde hace unas semanas os vengo mareando con algunos post tanto en Facebook como en mi blog, referente a mi encuentro dialéctico con un carismático personaje de los medios de comunicación de mi localidad, me refiero a Pepe Llorca Piqueres, pues bien, os voy a desvelar como quedaron los resultado de dicho combate pero antes, hagamos un recopilatorio de los mejores momentos.
Con esta inserción anunciaba los previos a nuestro primer encuentro.
Y tuvo lugar el primer asalto, que fue en su programa de INFORMACIÓN TV "Oxigénate. Según la audiencia que nos estuvo viendo, casi llegamos a empatar, sin embargo Pepe estaba en su medio, así que le dejé cierta ventaja.
Pero todavía estaba pendiente el segundo encuentro, el decisivo.
Y llegó el tan ansiado momento.
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