¿QUÉ HACE UNA ESCRITORA EN UNA HERMANDAD?

Foto propiedad de Estudios Omh,
la he encontrado por casualidad
y creo, que es la única que tengo
bajo esta curiosa apariencia.

Algunos puede que piensen que no debería colocar este artículo en mi blog, pero creo que es importante ya que gracias a pertenecer a una hermandad de Semana Santa, empecé a cultivar mi gran afición por devorar documentación de antiguos archivos y legajos olvidados de la historia, con los cuales pudiera sustraer algún matiz atractivo que me sirviese de caldo de cultivo para una próxima novela, y así fue.

Cuando hace unos años me zambullí por propia voluntad en la búsqueda de la procedencia y raíces de la Comunidad Agustina, con la única intención de realizar para su web un artículo mediante el cual pudiesen saber las generaciones venideras, la gran trascendencia que habían tenido estos frailes, no solo en nuestra Comunidad, sino también  en todo el mundo, no sabía que ese simple hecho iba a traer consigo que, nada más finalizarlo, me zambullese de nuevo en el que sería el primer tomo de una trilogía que se remontaba a la opulencia y gloria del Imperio Romano, allá por el 325 a. C., y finalizaba en nuestros días.

Como algunos de vosotros sabréis, los frailes de la Orden de San Agustín tienen el gran privilegio de ser los ayudas de cámara de su Santidad el Papa Francisco I, así como lo han sido de sus antecesores, pues bien, leyendo un poco más sobre sus bulas y privilegios, etc, me encontré con otro tema que me apasionaba desde hacía tiempo, me refiero, al de las órdenes mendicantes y por ende, al de los Templarios.

Artículo mencionado en la web de dicha Hermandad

 

Es curioso ver de qué forma tan casual viene la inspiración para un escritor. Quién me iba a decir a mí, que el hacer un artículo para la web de una Hermandad de Semana Santa, me iba a inspirar hasta tal punto, que tras él, iniciara mi trilogía de tres volúmenes de EL LEGADO DE FLAVIA JULIA.